La historia que nos
narra ‘Brooklyn’ es la de Ellis Lacey, una chica de un pequeño pueblo
irlandés que se traslada a trabajar a Estados Unidos, abriéndose ante ella todo
un mundo de nuevas oportunidades. Una vez allí, le costará librarse de la
nostalgia y de lo que supone el exilio, pero aún así, encontrará su sitio en
esa gran ciudad y hasta a su primer amor. Ese trayecto geográfico en el
transcurso de las páginas se irá convirtiendo en un tránsito hacia la madurez y
en el descubrimiento de un nuevo mundo, en el que se manifiesta el amor, la
libertad pero también las sombras del clasismo y el racismo.
Pero como suele pasar,
el mundo que se ha ido construyendo poco a poco, se desmorona de pronto cuando
recibe noticias trágicas de Irlanda que la obligan a regresar. Será entonces
cuando el peso de su familia y su pasado empañen por completo el presente. También
hay un cierto pose de resignación y nostalgia que nos conduce a una personal
idea del destino. Al comenzar la novela, son los demás los que toman las decisiones
por Eilis quien, poco a poco, toma las rindas de su vida, aunque al final el lector
no tenga claro si la última y crucial decisión que toma no habrá estado
empujada por las circunstancias. Eilis en realidad acepta su destino como le
viene dado, adaptándose a él. Quizá por eso el final de la novela , si bien
abrupto, resulta amocionante.
Lo más llamativo de
esto libro, y lo que le hace ser un auténtica delicia, es la manera con que se
afronta esta, en principio, convencional historia. La forma de narrar, sin
estridencias y con un lenguaje que poco a poco, consigue hacer que el lector
permanezca atento a todo lo que sucede y no sólo eso, sino que a cualquiera con
una mínima sensibilidad le surge la necesidad de compartir las vivencias de la
protagonista.
Como muestra de ese
lenguaje atinado y delicado se puede nombrar la magistral escena, por la
forma tan elegante con la que la relata, en la que la protagonista descubre la
tendencia sexual de una de las mujeres con las que comparte los días, tema nada
baladí ya que Colm Tóibín siempre ha hecho publica su condición homosexual y ha
volcado esta temática en varias de sus obras.
En cuanto a Colm Tóibín, nació en Enniscorthy,
Irlanda, en el año 1955.
Pertenece a una saga familiar íntimamente ligada con
la causa irlandesa. En sus obras explora de manera profunda la sociedad
irlandesa, a la vez que suele interesarse por el hecho de vivir en el extranjero,
no obstante, después de licenciarse partió a Barcelona, y a día de hoy vive la mitad del año en el
Pirineo leridano, hablando perfectamente castellano y catalán. Ha ido
construyendo a lo largo de sus obras una reflexión sobre la identidad, el
exilio y el poder de la familia en el desarrollo personal.
Entre sus obras, algunas han llegado a nuestro
país de la mano de distintas editoriales como Mala Sangre (1998), Crónica de la
noche (2002) ,El faro de Blackwatera (1999) o El amor en tiempos heroicos
(2002).
Y debemos mencionar que fruto de su primer
contacto con Barcelona, nació su primera novela The South (1990) y Homage to
Barcelona (1990).
De igual modo, los premios que aparecen en sus
vitrinas son numerosos, destacando dos premios Booker.
No hay comentarios:
Publicar un comentario